Virilo cuanto tiempo sin entrar, ya no te digo mas,pues ya te lo ha dicho Kiko, se agradece el agua lo malo es los granizos que estropean cepas y frutales,un saludo Pizarro.
Las fotos son preciosas, pero no ademas de la belleza que muestran esas viñas en pleno periodo de primavera, y la tecnología moderna para el aprovechamiento de los recursos, no puedo dejar de recordar en ellas, el otro complemento de la realidad, aquellos inviernos de mi pre-adolescencia, mi adolescencia y mi juventud, que las circundan en mis recuerdos, cuando a muy temprana edad samertaba ( recoger los sarmientos después de la poda), en la dehesa Guareña, y en Cañá, cuando en la tierras arenosas, después de podar, las lluvias eran generosas con la tierra, y los sarmientos quedaban bajo la tierra. Al recoger los sarmientos, y en especial aquellos mas largos, al tirar de ellos salían de la tierra, para azotar la cara de quienes los recogíamos, produciendo sobre la cara un descarga de energía, que producían una dosis considerable de mala leche.
Pero que en todo caso, creo que aquellas experiencias nos curtieron a muchos, para afrontar con valentía las dificultades que la vida nos iba a poner por delante.
Hay que ver todo que una una foto nos hace sentir, y/o recordadar.
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Bienvenido Virilo, se te hechaba de menos. Muy bonita esta foto de las cepas brotando sobre el cielo. Un abrazo
ResponderEliminarGracias Kiko. Un abrazo.
ResponderEliminarmuy bonitas las afotos
ResponderEliminarVirilo cuanto tiempo sin entrar, ya no te digo mas,pues ya te lo ha dicho Kiko, se agradece el agua lo malo es los granizos que estropean cepas y frutales,un saludo Pizarro.
ResponderEliminarGracias al anónimo y un abrazo para Pizarro.
ResponderEliminarQue contraste de colores!!! en verdad que la naturaleza es hermosa.
ResponderEliminarEres un buen captador de momentos efímeros y de imagenes perdurables,
Un saludo
Que contraste de colores!!! en verdad que la naturaleza es hermosa.
ResponderEliminarEres un buen captador de momentos efímeros y de imagenes perdurables,
Un saludo
Las fotos son preciosas, pero no ademas de la belleza que muestran esas viñas en pleno periodo de primavera, y la tecnología moderna para el aprovechamiento de los recursos, no puedo dejar de recordar en ellas, el otro complemento de la realidad, aquellos inviernos de mi pre-adolescencia, mi adolescencia y mi juventud, que las circundan en mis recuerdos, cuando a muy temprana edad samertaba ( recoger los sarmientos después de la poda), en la dehesa Guareña, y en Cañá, cuando en la tierras arenosas, después de podar, las lluvias eran generosas con la tierra, y los sarmientos quedaban bajo la tierra. Al recoger los sarmientos, y en especial aquellos mas largos, al tirar de ellos salían de la tierra, para azotar la cara de quienes los recogíamos, produciendo sobre la cara un descarga de energía, que producían una dosis considerable de mala leche.
ResponderEliminarPero que en todo caso, creo que aquellas experiencias nos curtieron a muchos, para afrontar con valentía las dificultades que la vida nos iba a poner por delante.
Hay que ver todo que una una foto nos hace sentir, y/o recordadar.
Un saludo Virilo.
Jfgt